domingo, 14 de febrero de 2016

La infidelidad

La infidelidad se ha vuelto el pan de cada día de muchos y en grandes escalas. Hoy día vemos como se comenta sobre el adulterio que es el causante de destruir familias enteras. La infidelidad no es justificable de ninguna manera. Tiene sus causas y sus efectos pero la primordial es el plan perverso de satanás de destruir las familias y a todo el mundo por ser este un ser malo y perverso. Entre las demás causas existen:
·         El descuido
·         Abandono
·         Maltrato
·         Seducción
·         Tentación
·         Negación
·         Falta de interés
Esas solo son algunas causas, porque pueden ser otras. La realidad es que el efecto es el mismo para todos. Una familia destruida, una esposa o esposo herido(a) lastimado(a) rebeldía, despecho y otros más. Muchas veces la víctima hace un cambio radical en su vida debido a ese golpe que sufrió ya no vuelve a confiar, de ser una persona buena puede tornarse en lo opuesto, la venganza y así por el estilo. Lo cierto es que si dejas que Jesús obre poderosamente no solo tu vida es restaurada también la de otros por medio de tu testimonio. Pero no siempre existen lo mismos comportamientos donde a veces es mejor separarse porque no se llega a una superación y aceptación y desencadena otro tipo de conflictos entre ese matrimonio.
Lamentablemente hoy día existe ese demonio de adulterio dentro de muchas iglesias que lleva a hombres y mujeres de Dios a ser infiel. Hombres y mujeres que entraron en un descuido espiritual y esas fueron las consecuencias. Cuando la palabra es clara y nos dice en la carta de Santiago 4: 7 Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros. Cuando una persona deja que ese demonio entre al oído y no lo reprende este pasa a la mente y de allí al corazón. No todos son débiles para ser tentados y caer pero existe un número que si es débil. Es por eso que en la biblia se da esta palabra en Joel 3:10 Forjad espadas de vuestros azadones, lanzas de vuestras hoces; diga el débil: Fuerte soy.
En estos últimos tiempos que vivimos vemos ese demonio de adulterio e infidelidad arrastrando a muchos inclusive cristianos, porque el vino a hurtar y destruir. Por eso hay que mantenerse como buen soldado con el escudo de la fe para apagar los dardos del maligno y la espada para que puedas vencer.
Consejos:
  • Damas
Si usted ama a Dios y a su esposo, evite ser piedra de tropiezo a los hermanos. Vista como dice la palabra: con decoro, pudor y modestia. Compórtese como una verdadera sierva de Dios así evitaras caer en tentación a los más débiles en la fe.

  • Caballero
Se puede ser un caballero respetando a Dios y a su esposa. No se ponga  halagar en ninguna manera a las hermanitas si no es con respeto y sabiduría, no sea que esta no recibiendo ninguna muestra de afecto o halago de parte de su esposo se confunda y comience a verlo con otros ojos recuerde que no todos están fuertes en la fe aunque así lo parezcan.

La infidelidad no se da en un cerrar y abrir de ojos, ella va surgiendo para cuando te das cuenta ya estas envuelto en el pecado. Porque el simple hecho de desear a una persona que no sea tu pareja o sea casado ya cometiste adulterio. Si ve que su pareja ha demostrado alguno de las causantes de la infidelidad antes de albergar ese demonio vaya a orar para no caer en tentaciones y caer usted en infidelidad y adulterio. Someta su carne a la búsqueda intensa de Dios que es el ayuno, oración, lectura de su palabra y congregarse. Hable con su pareja y busquen ayuda para que  todo vuelva ser como antes. Evite caer en rutina y recuerde para Dios todo es posible.
Dios te bendiga!

Naciparadorarte